Por experiencia propia puedo decir que cada año van a este cerro del Cubilete en el Estado de Guanajuato, México cientos de jóvenes homosexuales y religiosos que se mantienen al pendiente de cada una de las palabras que salen de boca de los predicadores. Cuando un sacerdote desobedece al Catecismo de la Iglesia católica con sermones como este parece olvidar que en vez de sembrar el mensaje de Amor y Libertad que nos legó Jesús está sembrando las semillas del odio y el resentimiento que ocasionan que después muchos jóvenes gays y lesbianas se conviertan al ateismo y en fervientes atacantes de la Iglesia. Aunque esto último es indeseable, también es lógico e inevitable. ¿Por qué no fue prudente? Sólo Dios lo sabe, ojalá este sacerdote se arrepintiera y reparara el daño esgrimido.
"No se agüiten por lo que está sucediendo"
03 de octubre de 2010 Milenio
Uno de los mensajes más claros y certeros que se enviaron a los jóvenes católicos que asistieron a la vigésima sexta marcha al cerro del Cubilete, fue la de reformar a la sociedad en la que viven a través de sus valores y su fe, ya que la sociedad actual enfrenta demasiadas cosas negativas.
“Hay gente que piensa en el aborto, hay gente que piensa en los matrimonios homsexuales y muchas ideas que estamos viendo ahora, la violencia”, señaló el padre Tomás San Román, sacerdote español que lleva diez años en México, por lo cual ya se siente más que mexicano; colabora en el equipo animador, el cual organiza la marcha y todos los eventos religiosos juveniles que se realizan durante el año. Por eso, pidió a los jóvenes que sean fuertes y valientes para expresar sus ideas.
“Yo les digo a los jóvenes que no se agüiten por lo que está sucediendo en la sociedad, juzgan a los jóvenes de personas sin valores, de que los han perdido pero ya hemos visto que sí tienen valores y que los quieren transmitir”.
Para el clérigo, la sociedad actual en la que viven los jóvenes está llena de cosas negativas, como la violencia o los matrimonios gays y el aborto
El sacerdote San Román aseguró que cada vez más son los jóvenes que asisten a este evento y que se lo toman más enserio, porque definitivamente sigue habiendo jóvenes que sólo van a pasear.
“Cada vez se van dando más cuenta de que la marcha juvenil tiene su sentido desde la eucaristía, de su encuentro con Jesús. Yo siento que Cristo Rey se encuentra más contento con la arquidiócesis de los jóvenes de León”, enfatizó el padre Tomás.
El clérigo enfatizó que la juventud católica debe de ser fuerte y valiente, para poder transmitir sus ideas y reformar la sociedad.
“Solamente podemos transformar la sociedad con ellos, desde ellos y para ellos. Si cada uno pone su granito de arena para construir esta sociedad con valores, podemos lograr algo muy grande. Nosotros también tenemos algo qué decir a esta sociedad, Somos muchos, no somos uno ni dos”, reafirmó el religioso español.
Alrededor de 15 mil jóvenes participaron ayer en la vigésima sexta marcha juvenil al cerro del Cubilete.
Según datos de Protección Civil, fueron 420 camiones de excursión los que llevaron a los jóvenes de varios lados de la república a una de las marchas más representativas e importantes que se hacen en el estado. Las marchas a Cristo Rey son parte del turismo religioso que se detona en la entidad.
La peregrinación comienza desde la noche anterior, cuando los jóvenes comienzan a llegar para estar desde muy temprano en el cerro del Cubilete y así poder ganar un lugar en la mezquita donde son celebradas las misas. Aunque se ven algunos jóvenes dormidos en el atrio del templo de Cristo Rey o a lo largo de la subida, bajos los árboles, la gran mayoría se mantiene despierto para escuchar la tradicional misa. Esta vez, el arzobispo José Guadalupe Martín Rábago no asistió, pero en su lugar fue el obispo auxiliar de la arquidiócesis de León.
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