“Esta fue la culpa de su hermana Sodoma: ella y sus hijas tenían orgullo, exceso de comida y próspera tranquilidad, pero no ayudaron al pobre y al necesitado”. (Ez 16, 48-49)

jueves, 22 de septiembre de 2011

1a temporada

Hermanos, hermanas:

Todo tiene un principio y un fin. Puesto que es mi deseo seguir publicando para compartir con ustedes las luces que me otorga el Espíritu de Dios para escribir este blog, les informo que damos fin a la primera temporada de "Católico y Gay", en espera de que pronto podamos iniciar con la segunda.

Y es que en este momento atravieso un proceso personal de maduración y crecimiento muy fuerte. Por lo que pido sus oraciones por mí y por todas las personas que están en este proyecto.

Sin embargo, les aviso que la revisión semanal del correo electrónico gayscatolicos@gmail.com seguirá realizándose con la misma frecuencia para que si hay alguien que necesite comunicarse con la administración del blog, se sienta en la completa libertad de hacerlo sabiendo que su correo será leído y contestado a la primera oportunidad.

Les digo hasta pronto y deseo que Dios nuestro Señor los bendiga y la Virgen los acompañe en cada momento de su vida.

martes, 6 de septiembre de 2011

El Papa que hasta un ateo desearía

Sin temor a equivocarme. Ayer leí esto y hoy, nadamás de pensarlo, todavía se me enchina la piel ante esta utopía.

Por Feliciano Mayorga

La semana pasada, un hermoso sueño me quitó la paz. Desde ese día, todas las mañanas, al oír el despertador, me abalanzo a la TV y los diarios con la esperanza de ver una nota de prensa que diga algo así como lo siguiente:

17 de Agosto de 2011. «El papa Benedicto XVI ha desaparecido del Vaticano. Los servicios de inteligencia de todo el planeta se afanan en hallarlo con vida. La OTAN está en estado de máxima alerta por temor a que se trate de un magnicidio, tal vez de un secuestro por parte de Al Qaeda. El catolicismo al borde de la guerra».

18 de Agosto de 2011. «Desconcierto internacional. Benedicto XVI ha sido hallado sonriente y sudoroso en Mogadishu, capital de Somalia. Desde un campo de refugiados, acaba de anunciar que iniciará una huelga de hambre en solidaridad con la población hambrienta. Su determinación es mantenerla hasta morir si la comunidad internacional no toma medidas urgentes para acabar con la miseria que asuela el planeta. El mundo escucha atónito la declaración».

19 de Agosto de 2011. «Todo es caos, preocupación e incertidumbre. Se suceden las reacciones oficiales. Nadie sabe cómo interpretar un gesto que viola los protocolos diplomáticos. Las autoridades de las cancillerías europeas y norteamericanas, a la vez que saludan tímidamente el gesto, lo desautorizan como un chantaje inadmisible por parte del líder de una Iglesia. De admitirse podría dar lugar a una serie indefinida de injerencias por parte de otros dirigentes religiosos en el orden político internacional. Le exigen el cese inmediato de la huelga de hambre».

20 de Agosto de 2011. «El Vaticano, presionado por los gobiernos occidentales, ha convocado un conclave urgente y extraordinario para dar respuesta al insólito y perturbador acontecimiento. Se filtra la idea de que el Papa podría haber perdido sus facultades mentales y debería ser incapacitado como legítimo sucesor de Pedro».

21 de Agosto de 2011. «Los mercados han entrado en un estado de pánico generalizado. Las bolsas se desploman. Las multinacionales temen una intervención de la ONU que pudiera limitar sus beneficios a escala global. Los principales centros financieros exigen a los gobiernos una respuesta urgente a la crisis provocada por Benedicto XVI, al que califican abiertamente de comunista e irresponsable».

22 de Agosto de 2011. «Se espera una acción inminente por parte de la OTAN, como respuesta a la demanda de la curia romana, para capturar al sumo Pontífice, devolverlo con vida al Vaticano y realizarle un exhaustivo diagnóstico de salud mental por parte de eminentes psiquiatras. Se especula con un brote de demencia senil. El derecho canónico admitiría in extremis la posibilidad de nombrar un nuevo sucesor si se verifica la grave enfermedad mental del actual Vicario de Cristo».

23 de Agosto de 2011. «La imagen de un Papa despojado de sus pomposas vestiduras, ataviado con las raídas ropas de los nativos y dispuesto a llevar hasta el sacrificio final su compromiso con los más pobres del planeta, ha conmocionado a la opinión pública mundial. Es como un delirio colectivo. La gente se echa a la calle presa de un sentimiento de júbilo, ocupando calles, plazas y parlamentos».

24 de Agosto de 2011. «Todo parece irreal, es como si el mundo hubiera perdido de pronto su gravedad y flotara en un estado de gracia y ligereza. Hay gente por todas partes. Unos lloran de emoción, otros cantan salmos, otros rezan tomados de las manos, otros comparten lo que tienen con los más pobres, otros se abrazan sin motivo, los enemigos se declaran la tregua. Un sentimiento de hermandad surca la tierra. Es indescriptible. Nadie recuerda algo semejante».

25 de Agosto de 2011. «Ante el riesgo de captura del santo Padre, el Dalai Lama, el patriarca de Constantinopla, numerosos imanes y rabinos, y los principales líderes protestantes han decidido sumarse a la huelga de hambre de Benedicto XVI. Se añade cada día una marea de niños, mujeres y ancianos, en cuyo rostro se refleja el orgullo de saber que, al menos por una vez, Dios está de su parte».

26 de Agosto de 2011. «Filósofos e intelectuales afirman que lo que está ocurriendo, tanto si el Papa muere o logra derrotar al hambre, supondrá un punto de inflexión en la humanidad. Su importancia ya se compara con el final del imperio romano, el descubrimiento de América o la derrota del nazismo. Sectores izquierdistas, ateos y liberales se movilizan a favor de los cristianos y el parlamento de Israel ha acordado devolver los terrenos ocupados a Palestina. La historia parece haber perdido su racionalidad. Ningún estudio sociológico, económico o político había previsto un suceso tan enorme ¿Qué está pasando? ¿El mundo se ha vuelto loco?, ¿de amor?».

Conclusión: el Papa es uno de los pocos seres humanos capaces, por su estatus, de realizar tan hermosa quimera. Por eso cada día, apenas me despierto, me lanzo a los kioscos para ver si es hoy está la gran noticia, el día en que el Papa de mis sueños realizará la gesta que salvará al mundo.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Evangelio de Lucas según la Biblia Queer IV

HOSPITALIDAD.-

A las personas “queer” les encanta compartir meriendas y fiestas. Nuestras comidas “queer” – ya sean “lluvia” espontáneas o elegantes banquetes – son un medio de conversación, comenzar y continuar relaciones sociales. El alimento y las conductas mientras se come, son parte de un complejo cultural; cumplen funciones sociales y culturales, además de satisfacer necesidades nutricionales. Construyen y expresan relaciones sociales y valores culturales; su forma puede imitar valores familiares y expresar visiones alternativas de relaciones y familias. Las comidas “queer” a menudo están abiertas a parejas, niños, amigos, amigos de amigos y antiguas parejas. John McNeill observa que la hospitalidad es una virtud “queer”, citando a Henri Nouwen y su definición: “esa virtud que nos permite romper la estrechez de nuestros miedos y abrir nuestra casa al extraño, con el entendido de que la salvación llega a nosotros en la forma de un viajero cansado” (McNeill 1988: 97) Para McNeill, la hospitalidad “queer” se expresa en la parábola del Buen Samaritano, donde el samaritano es un “drag queen” que levanta a un hombre herido en la Calle 42 de Nueva York y ve pasar a un sacerdote católico y a un trabajador social (McNeill 1988: 96) Pero vayamos más allá de lo que hace McNeill. Imaginemos que ese hombre herido es un cardenal católico o evangelista de televisión como Pat Robertson.

La sorpresa llega en el amor demostrado hacia alguien que ha perseguido activamente a la comunidad “queer” y ha instalado un clima de violencia social. Comunica el choque intencional de la parábola del samaritano y el mandato de Jesús, en cuanto al amor a nuestros enemigos. El reino de Dios es radicalmente inclusivo, y Jesús recomienda a su audiencia que imiten al samaritano compasivo, un excluido odiado y despreciado de esa época. La hospitalidad “queer”, de la misma manera, encuentra a Dios presente en el extranjero, el enemigo, o el líder religioso homofóbico.

Las comidas son las metáforas de Jesús para hablar del reino de Dios; expresan la inclusividad de Dios, las reglas de Jesús sobre la hospitalidad son profundamente “queer”; hace un giro a las costumbres y valores judíos sobre la comida para mostrar el reino de Dios. Jesús amaba festejar; se opone al ministerio de Juan el Bautista: “Porque Juan el Bautista no ha venido para comer pan y beber vino, y ustedes dicen que tiene un demonio; el Hijo de la Humanidad ha venido a comer y beber y ustedes dicen: Miren a un glotón y borracho, amigo de los cobradores de impuestos y pecadores” (7.34) Jesús se asocia con cobradores de impuestos y pecadores (7.50; 11.4; 15.7,10; 18.9-14; 19.1-10) Sus comidas son fiestas fuera de lugar para los judíos, con sus agendas estrictas de santidad/pureza, porque transgreden esa etiqueta de santidad/pureza y sugieren algo nuevo, con relaciones fuera de los límites. El perdón que Dios entrega a los pecadores, subvierte el sistema del templo, que ofrece sacrificios de reconciliación con Dios.

¿Cuáles son las reglas de hospitalidad en las comidas de Jesús? Él hace “queer” las reglas de etiqueta, detallando a quiénes no invitar: amigos, parientes, vecinos ricos, y cualquiera que pueda devolver el favor de la invitación (14.12) Los huéspedes invitados son reemplazados por los que nadie quiere: los pobres, los lisiados, el rengo y el ciego (14.13-14) La lista de invitados se repite en la parábola de la Gran Cena, en que el anfitrión pide al servidor que vaya a las calles e invite a las personas marginadas, al banquete (14.21) Aquí, Jesús incluso impacta a algunos anfitriones “queer”, invitando no a los super estrellas, sino a aquellos con cuerpos menos que perfectos y los “nadies queer” No existe la capacidad de reciprocidad ni la posibilidad de mejorar el estatus del anfitrión dentro de esos grupos. El orden social es revertido en el reino de Dios, ya que las comidas festivas de Jesús divide a las familias, pone a sus miembros en diferentes lugares, e invita a todo tipo de personas sospechosas, con lugares sociales excluidos y empleos “queer”. Los extraños se convierten así en “de dentro”, y viceversa. Estas comidas expresan metafóricamente la invitación promiscua de Dios, a la gracia y compasión para todos, y la inversión de la jerarquía. Para Dominic Crossan, las comidas de Jesús crean una visión igualitaria del reino de Dios:

“El reino de Jesús, de “nadies” e indeseables, en el aquí y ahora de este mundo, es seguramente igualitaria y, como tal, hace que las distinciones sexuales y sociales, políticas y religiosas se conviertan en completamente irrelevantes y anacrónicas…Pero la falta radical de diferenciación social permanece como un desafío a todas las especificaciones, interpretaciones y actualizaciones del Reino proclamado por Jesús” (Crossan 1991: 298)

Esta visión igualitaria crea un problema para las fracciones judías que competían con su propia política y santidad, y sus intentos de construir muros y barreras alrededor de la gracia de Dios. La gracia incondicional de Dios todavía permanece “fuera de lugar”, o destructiva para la mayoría de iglesias, donde la doctrina, la conducta aceptada y los “corazones puros” (“sin deseos eróticos”) son necesarios para recibir la comunión...”

Parte 3                                                                                Parte 5